N° 29 | 16.01.2022
El Consejero de Estado chino, Yang Jiechi, y el Ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, asisten a diálogo estratégico de alto nivel en la ciudad de Anchorage en Alaska, Estados Unidos, el 18 de marzo de 2021. [Xinhua]
Por qué China entrará en su periodo más próspero de un milenio
Yao Yang
Yao Yang (姚洋) es profesor del Centro de Investigación Económica de China (CCER, por sus siglas en inglés) y la Escuela Nacional de Desarrollo (NSD) de la Universidad de Beijing. Actualmente trabaja como director del CCER y decano de la NSD

En los últimos años, China ha fortalecido su campaña contra la corrupción, ha regulado la expansión desordenada del capital y se ha comprometido a alcanzar la prosperidad común. Sumando a todo esto el declive del crecimiento económico de la segunda mitad de 2021, algunos empresarios chinos empiezan a perder confianza en la perspectiva del desarrollo chino. Yao Yang, sin embargo, dijo en una reciente conferencia que China es vista como una tierra de esperanza, manteniendo el flujo de inversión extranjera directa (IED) más alto del mundo (177 mil millones de dólares, un quinto del total global) en la primera mitad de 2021 según la OCDE. Añadió que China entrará en su periodo más próspero de un milenio en los siguientes 30 años. Los avances tecnológicos y la acumulación de capital son las principales fuerzas motrices para el desarrollo económico. A nivel mundial, China ha desempeñado un papel importante en la tecnología intermedia, y se ha convertido en el líder mundial en varias áreas de tecnología avanzada, como la inteligencia artificial (IA), las nuevas energías y los vehículos eléctricos. Por ejemplo, con el mapeo de inteligencia artificial, incluso los ancianos chinos están acostumbrados a rastrear sus paquetes en línea con sus celulares en tiempo real; el 75% de los componentes energéticos solares del mundo se fabrican en China y se espera que los vehículos eléctricos del país se exporten al resto del mundo en los próximos 10 años como los autos fabricados en Japón que dominaron el mundo en los años 80. Algunos economistas piensan que la economía china ha llegado a su pico de acumulación del capital después de mantener un crecimiento rápido de 40 años. Yao afirma que la acumulación del capital seguirá creciendo siempre que China esté en el proceso de urbanización, en la que según se estima, 200 millones de campesinos chinos se trasladarán a la ciudad en los próximos 15 años. Yao cree que estos dos factores propulsarán el crecimiento de largo plazo de China. Según el autor, si el crecimiento chino fuera 1,5 puntos porcentuales más alto que Estados Unidos, el país sustituiría a Estados Unidos y sería la mayor economía mundial entre 2028 y 2030. Además, el PBI del país duplicaría al de Estados Unidos en 2049 cuando se espera que China alcance el objetivo para el segundo centenario (第二个百年目标 dì èr gè bǎinián mùbiāo) de convertirse en un moderno país socialista en todos los aspectos en el proceso de revitalización nacional.

La trayectoria histórica de las relaciones sino-estadounidenses y la nueva etapa de “punto muerto estratégico”
Tian Feilong
Tian Feilong(田飞龙) es profesor asociado del Instituto de Estudios Avanzados de Humanidades y Ciencias Sociales de Escuela de Leyes de la Universidad de Beihang

La relación bilateral Estados Unidos-China es la más crítica en el sistema mundial actual. Tian Feilong señala que las percepciones e interacciones de Estados Unidos con China siempre han estado caracterizadas por un impulso colonialista y un sentido de vanidad moral. También por una fuerte racionalidad económica motivada por intereses capitalistas y el mercado. Comenzando con el Tratado de Wanghia (望厦条约 wàng shà tiáoyuēn) firmado por ambos países en 1844, los Estados Unidos intentaron influenciar y transformar China con los principios de mercado, leyes y democracia de estilo occidental. Para finales de los años 40, sin embargo, la estrategia de Estados Unidos para transformar China falló al apoyar al gobierno del Kuomintang, que representaba los intereses de las poderosas élites locales. El ascenso decisivo del Partido Comunista de China (PCCH) y la auto-liberación del pueblo chino rompieron el “gran plan estadounidense” para capturar el mercado y transformar la democracia de China. El autor argumenta que la relación entre ambos países desde la fundación de la República Popular China en 1949 se ha alternado entre una guerra caliente a corto plazo, una guerra fría a largo plazo, y el contacto y reconciliación. Estados Unidos está directamente enfrentado con el PCCH, que ha abrazado al Marxismo y echado raíces en el pueblo chino. Durante la Guerra Fría entre Estados Unidos y la Unión Soviética, ante a un antagonismo ideológico del PCCH y una China socialista bajo su liderazgo, Estados Unidos buscó una nueva estrategia de “compromiso” (接触主义 jiēchù zhǔyì). Limitó el contacto y la guía con China en las relaciones económicas y diplomáticas, para eventualmente dividir al campo socialista y lograr una convergencia entre las instituciones y valores chinos y occidentales. Lo primero fue logrado exitosamente con el colapso de la Unión Soviética, pero lo segundo ha sido bloqueado bajo el liderazgo del presidente Xi Jinping desde 2012. El rápido desarrollo del país es un desafío directo a la hegemonía global de Estados Unidos. En consecuencia, no puede aceptar el nuevo sistema de globalización planteado por China de la Nueva Ruta de la Seda y de “una comunidad de futuro compartido para la humanidad”, que está realmente basado en los valores universales de paz y desarrollo. En su “Discurso de la Nueva Cortina de Hierro” en julio de 2020, el Secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, anunció el fin de la “doctrina de compromiso” y el comienzo de la nueva estrategia de “doctrina de contención”, y declaró que la “Nueva Guerra Fría” entre China y Estados Unidos había comenzado. La relación Estados Unidos-China pasó gradualmente de las posiciones defensivas y ofensivas en la guerra comercial al “balance de poder” de la fuerza nacional integral. Esto también implica un mayor cambio en la estrategia exterior de China, pasando de las estrategias previas de “esconder nuestra fuerza y esperar nuestro momento” (韬光养晦 tāoguāngyǎnghuì) a la estrategia "proactiva y en pie de igualdad" (平视有为 píngshì yǒu wéi). El autor argumenta que aunque Estados Unidos no usa oficialmente el término “Nueva Guerra Fría”, claramente la “cooperación” ya no es más el principal eje de las relaciones entre los dos países. Estas han entrado en una fase de punto muerto estratégico, que tiene tres fundamentos: primero, la teoría de la etapa estratégica "Sobre la Guerra Prolongada" de Mao Zedong (论持久战 lùn chíjiǔ zhàn); segundo, la “disminución de la resiliencia” de la hegemonía estadounidense; y tercero, el crecimiento sistemático del rejuvenecimiento nacional y la gobernanza global de China.

¿Quiénes son los 564 millones de chinos con un ingreso mensual de 140 dólares?
Ning Nanshan
Ning Nanshan (宁南山) es un escritor en las redes sociales de Shenzhen y columnista de Guancha.cn

Según el recién publicado Anuario Estadístico de China 2021, en 2020, China tuvo 564 millones de personas con un ingreso disponible per cápita mensual, es decir, el ingreso para consumo o ahorro después de deducir de los impuestos personales, de solo más de 1,000 yuanes (140 dólares) o incluso menos, las cuales representaron el 40% de la población total. Sin embargo, el número de personas de bajos ingresos está disminuyendo. En mayo de 2020, el Primer Ministro Li Keqiang dijo que “600 millones de personas en China solo ganan 1,000 yuanes al mes” (610 millones en 2019), provocando una enorme discusión pública. En su artículo, Ning Nanshan clasifica la población de bajos ingresos de China en cinco grupos principales: alrededor de 161 millones de ancianos, sobre todo en las zonas rurales, que solo tienen una pensión mensual media de 174 yuanes (27,3 dólares), y ganan dinero a través de la ganadería y la venta de verduras; más de 80 millones de personas con discapacidades o enfermedades que les afectan el trabajo; decenas de millones de personas que todavía trabajan en el cultivo o pastoreo en las regiones menos desarrolladas de etnias minoritarias, como Liangshan de la Provincia de Sichuan y Xinjiang del sur; casi 10 millones de personas desempleadas, y el grupo laboral mayor de 40 años pero que tiene un bajo nivel educativo, como los camioneros, los trabajadores de la construcción, barrenderos, guardias de seguridad, como también sus hijos. Es un hecho notable que, gracias al proyecto de erradicación de la pobreza, el ingreso anual per cápita del 20% más pobre de la población (282 millones) haya aumentado en un 65,75% a 7.868,8 yuanes (1.234,8 dólares) de 2014 a 2020, registrando el crecimiento más rápido entre todos los grupos. El autor afirma que el número de personas de bajos ingresos seguirá cayendo con la universalización de la seguridad social, la elevación del nivel educativo y el crecimiento económico de las ciudades que no son de primer nivel como Nanjing, Hefei y Chengdu. Concluye que para alcanzar la prosperidad común mientras se sigue “agrandando la torta” (o buscando mayor crecimiento económico), es necesario fomentar la distribución equilibrada de las industrias por el todo el país para mitigar la brecha de desarrollo regional, generar oportunidades laborales para los que no pueden salir de su pueblo natal, y mejorar los estándares de vida de las personas de bajos ingresos.

Contexto histórico de la estrategia de revitalización rural de China
Chen Wensheng
Chen Wensheng(陈文胜)es decano del Instituto de Investigación de Revitalización Rural de China de la Universidad Normal de Hunan, y miembro del Comité Asesor de Vitalización Rural del Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales

China está comprometida a seguir el camino de la revitalización rural socialista con características chinas. Chen Wensheng revisa la evolución de seis etapas históricas del Partido Comunista de China (PCCH) en el manejo de las relaciones campo-ciudad desde 1927, echando luz en el enfoque actual de la revitalización rural como parte de su misión histórica. La primera etapa fue después de la derrota de la Revolución China – una importante revolución contra los señores feudales entre 1924 y 1927 dirigida por la alianza del PCCH y el Kuomintang (KMT). Esta etapa estuvo caracterizada por los levantamientos de los obreros urbanos, que cambiaron el enfoque del Partido y abriendo el camino para la estrategia de cercar las ciudades desde el campo. La segunda fase fue justo antes de la Revolución China de 1949, cuando el partido decidió cambiar el enfoque del campo a las ciudades, promoviendo la transformación de China de un país agrícola a un país industrial. Esta fue la primera vez que Mao Zedong expresó claramente que la dirección del desarrollo futuro de China era la “modernización” (现代化 xiàndàihuà). Como resultado de la separación de las áreas urbanas y rurales, China estableció dos sistemas diferentes de registro de hogares, sistemas de asignación de recursos, y una estructura dual en la cual la industria domina a la agricultura. La tercera fase empezó en 1978 cuando China entró en la nueva era de reforma y apertura. La reforma fue iniciada en las áreas rurales pobres y, en 1985, por primera vez desde la fundación del PCCH, el campesinado contribuyó una parte mucho mayor que la ciudadanía urbana en gastos del consumidor. Al mismo tiempo, emergieron empresas en los municipios. La vasta mayoría de las viviendas de un millón de dólares eran de granjeros. La cuarta fase estuvo marcada por la 3º Sesión Plenaria del 12º Comité Central del PCCH en octubre de 1984, que anunció que el enfoque del trabajo cambiaba una vez más del campo a las ciudades. Una economía orientada a las exportaciones, a gran escala e intensiva en mano de obra desarrollada rápidamente, y el status de “fábrica del mundo” de China tomó forma gradualmente. Sin embargo, los “Tres Problemas Rurales” (三农问题 sān nóng wèntí) se convirtieron en el consenso social de esa era. La quinta fase comenzó en noviembre de 2002 cuando el 16º Congreso Nacional del PCCH propuso formalmente la integración del desarrollo económico-social urbano y rural. Durante esta etapa, China aumentó los subsidios agrícolas y abolió completamente los impuestos al sector. En el 18º Congreso Nacional, el PCCH inició el sexto cambio en su enfoque, haciendo de las vastas zonas rurales el principal campo de batalla para combatir la pobreza y construir una sociedad moderadamente próspera. Después de erradicar la pobreza absoluta en 2020, junto con la implementación del segundo objetivo centenario del Partido, el gobierno central propuso que “para revivir la nación, el campo debe ser revitalizado”, ubicando a la revitalización rural a un nivel estratégico nacional sin precedentes. Para el autor, esto indica que el desarrollo social de China está evolucionando a una etapa avanzada de modernización con la integración del desarrollo urbano y rural.

Los tres saltos de la Sinización del Marxismo
Shen Chuanbao
Shen Chuanbao (沈传宝) es vicedirector del Quinto Departamento de Investigación del Instituto de Historia y Literatura del Partido del Comité Central del PCCH

El proceso de Sinización del Marxismo ha tenido tres saltos, proporcionando una guía ideológica al PCCH en distintos periodos históricos. En su artículo, Shen Chuanbao hace un análisis sobre la evolución histórica de estos tres saltos. En los primeros tiempos del Partido, debido a la falta de experiencia revolucionaria, el dogmatismo dominó en diferentes momentos, y el proceso revolucionario chino se encontró en una situación casi desesperada. Los comunistas chinos, representados por Mao Zedong, establecieron la vía ideológica de buscar la verdad a partir de los hechos (实事求是 shí shì qiú shì) y exploraron el nuevo camino democrático revolucionario de “rodear las ciudades desde el campo y conseguir el poder político con las armas,” que fue diferente de la metodología clásica marxista-leninista. Tras la reforma y apertura de 1978, Deng Xiaoping creó el sistema ideológico del socialismo con características chinas, volvió a establecer la vía teórica de buscar la verdad a partir de los hechos, aprovechó el enfoque de los tiempos de manera científica, hizo un resumen exhaustivo de la experiencia histórica desde la fundación de la Nueva China, cambió el foco a la economía, y comenzó el segundo salto histórico de la Sinización del Marxismo. Los líderes sucesivos como Jiang Zemin y Hu Jintao siguieron desarrollando la teoría del socialismo con características chinas y obtuvieron logros de fama mundial en el desarrollo económico. Desde el 18º Congreso Nacional del PCCH, la principal contradicción interna de China ha pasado de la productividad insuficiente al desarrollo desequilibrado. Internacionalmente, los logros chinos han agudizado la competencia de ideologías y sistemas sociales. Frente a los cambios sin precedentes en el mundo en un siglo, Xi Jinping está dirigiendo el tercer salto histórico de la Sinización del Marxismo, sintetizando la experiencia histórica, captando la esencia del Marxismo, insistiendo en la búsqueda de la verdad desde los hechos, y llevando a cabo con valentía innovaciones teóricas para seguir ofreciendo guía teórica a la revitalización de la nación china.

(Voces de China continuará interpretando el contexto histórico y la lógica para el desarrollo de la Sinización del Marxismo)

Suscríbase a Voces de China. El boletín es publicado cada domingo en inglés, español y portugués.Descargue el PDF de los artículos completos (automáticamente traducidos). El equipo editorial de Dongsheng no necesariamente comparte las opiniones de los artículos.

Siga nuestras redes sociales: