Según las estadísticas del último censo nacional, entre los años 2010 y 2020 la tasa de crecimiento de la población de Xinjiang (18,5%) fue más alta que el promedio nacional (5,28%). La población uigur de Xinjiang, que representa casi un 45% del total de la región, creció más rápidamente que muchos otros grupos étnicos. La investigación de campo de Li revela cómo la demografía de Xinjiang empezó a cambiar en 2017, con una tendencia hacia “baja tasa de fertilidad, baja tasa de mortalidad, y baja tasa de crecimiento”, a pesar de que la transición de Xinjiang está atrasada unos 20 años en comparación con otras partes del país. La alta tasa de fertilidad del sur de China antes del año 2017 puede ser atribuida a la falta de desarrollo social y económico, la implementación incompleta de la ley matrimonial y la política de planificación familiar, así como el impacto del extremismo religioso. Después de que Xinjiang empezó a promover la educación media obligatoria en 2013, la tasa de fertilidad de los adolescentes cayó de forma significativa. Además, Xinjiang ha implementado una política de planificación familiar uniforme a partir de 2017, permitiendo a la gente de diferentes grupos étnicos tener la misma cantidad de hijos. Por último, Li sostiene que discutir con las acusaciones occidentales impulsadas por la ideología sobre el “genocidio de Xinjiang” es como “tocar el piano para una vaca” (对牛弹琴 duì niú tán qín): un desperdiciode esfuerzo.

A medida que China prioriza su estrategia de la circulación dual y hace énfasis en la autosuficiencia tecnológica, se preocupa de que el enfoque interno se desvíe de la política de apertura al exterior de 1978. En su discurso del 3 de julio, la Profesora Jiang explica que China tiene que seguir estrictamente una política de apertura externa neutral y de nivel más alto: no debe ser más favorable para la exportación que la importación, ni más favorable para la inversión extranjera directa (IED) en China que la inversión china en el extranjero. China se ha convertido en un jugador clave en la globalización digital, donde los esfuerzos conjuntos de múltiples países se han expandido y han cubierto la cadena de suministro entera, abarcando la innovación, el diseño y los servicios. Por ejemplo, la Plataforma Internacional de Comunicación con Expertos Médicos de DingTalk, bajo el Grupo Alibaba, contribuyó significativamente a la lucha contra el COVID-19 en los países en vía de desarrollo. Además, China cuenta con dos de los 10 principales puntos metropolitanos clave de innovación en el mundo en el campo de tecnologías de la información y la comunicación (TIC). En respuesta a las sanciones estadounidenses contra las empresas chinas, Jiang urge a China a equilibrar la apertura al exterior y la autosuficiencia tecnológica a través de seguir integrándose en la cadena global de suministro digital, mejorar sus capacidades técnicas con colaboración conjunta, e impulsar la innovación doméstica.

En 1936, Mao Zedong declaró: “Quien resuelva la cuestión de la tierra se gana a los campesinos, y quien gane a los campesinos gana a China.” El Profesor Sun argumenta que las políticas agrarias del PCCH durante los últimos 100 años han sido cruciales para que este obtenga el apoyo de los campesinos, gane la revolución, y siente bases para la industrialización. Para servir a los campesinos, el PCCH estableció el Sistema de Responsabilidad por Contrato Familiar en la producción en 1978 con el objetivo de aumentar la productividad y satisfacer las crecientes necesidades materiales y culturales del pueblo. Esta reforma protegió los intereses de los campesinos y despertó su entusiasmo por la producción, creando una metodología orientada al mercado bajo la propiedad pública socialista. Desde que Xi Jinping tomó posesión en 2012, el PCCH ha mejorado el sistema de reforma agraria y separado la propiedad, la tenencia, y la operación de la tierra, incrementando aún más los beneficios de los campesinos. Sun cree que el PCCH debe seguir coordinando las funciones económicas y políticas de la tierra y protegiendo los derechos e intereses de los campesinos durante la profundización de la reforma y la revitalización rurales.

En septiembre de 2020, China se comprometió a alcanzar la neutralidad de carbono dentro de 40 años para 2060, con el objetivo de llegar al pico de emisiones en 2030. El Profesor Ding señala que es un error común el creer que Estados Unidos y los países europeos tardarán 60 años en obtener la neutralidad de carbono desde su pico de emisión, ya que, en realidad, necesitarán 70 u 80 años. Ding y su equipo plantean un marco analítico de la neutralidad de carbono con 9 ítems, en el que ilustran los problemas y desafíos claves para China para alcanzar sus objetivos en torno a la huella de carbono cero. Entre esas preocupaciones, el país tiene que predecir la demanda de energía en áreas clave como la vida residencial, la industria, la construcción y el transporte, así como el consumo de energía total de la población a lo largo del tiempo. Es necesario también que China encuentre maneras de aumentar la proporción de energías de bajo carbono, sobre todo las energías eólica, solar, hidráulica, geotérmica, y nuclear. Ding y su equipo proponen hacer de la meseta tibetana-Qinghai un área de demostración para la neutralidad de carbono. Por último, aunque muchos países occidentales dicen que China es el mayor contaminador del mundo, sus emisiones per cápita en 2019 (7,28 toneladas por año) fueron mucho más bajas que las de Estados Unidos (16,10 toneladas por año). Por tanto, el autor urge a China a establecer un sistema normalizado de monitoreo, cálculo, reporte, y verificación de las emisiones de carbono lo antes posible para refutar los mitos de Occidente y fomentar la voz china en el cambio climático en la escena global.

¿Qué tiene que hacer China para enfrentar la hegemonía de Estados Unidos y las provocaciones de sus políticos? La experiencia y sabiduría de Mao siguen siendo un arma poderosa en la actualidad. Qi Yiming explora los principales comentarios de Mao hechos durante acontecimientos claves de la historia china, incluyendo la Guerra de Liberación del Pueblo Chino, la Guerra de Resistencia a la Invasión de Estados Unidos y Ayuda a Corea, la recuperación del puesto legítimo de China en la ONU, y la normalización de la relación sino-estadounidense en 1972. Una de las afirmaciones más conocidas de Mao­ – “El imperialismo estadounidense es un tigre de papel” – nos inspira a confrontar el unilateralismo y la hegemonía con confianza y paciencia, a mantener nuestro espíritu de lucha, y a mejorar nuestra estrategia. Mao también considera que las bases militares de Estados Unidos por todo el mundo “no son sino lazos echados al cuello del propio imperialismo”. El imperialismo estadounidense provoca tensiones que, a su vez, han “educado y fortalecido” a la gente de todo el mundo. En la lucha contra Estados Unidos, tenemos que “abandonar la idolatría por Occidentes” y combatir el impacto de “la adulación, la adoración, o el miedo a Estados Unidos”. Por último, “solo con y en el combate podemos tener fe en la victoria.”